Antonia Pastrana, AMEPAP
Antonia Pastrana es desde julio de 2013 la presidenta de la Asociación de Mujeres Empresarias de Albacete (AMEPAP). Hablamos con ella sobre los objetivos y ámbitos de actuación de la misma así como sobre el perfil del tejido empresarial femenino de la provincia
¿Cuándo y con qué objetivos nace la Asociación de Mujeres Empresarias de Albacete?
La Asociación de Mujeres Empresarias de Albacete y Provincia se fundó en 1996. La nueva junta directiva, que yo presido, tomó posesión en julio de 2013. AMEPAP persigue incrementar y potenciar las áreas de negocios de las empresas de mujeres emprendedoras de Albacete. Entre nuestros objetivos, queremos convertirnos en influencia social y empresarial en todos los temas de empresa, mujer y emprendimiento de la provincia. Ser un apoyo en la situación actual económica que estamos viviendo, promoviendo actuaciones que aumente las actividad comercial de nuestras asociadas. Proporcionar una cartera de servicios que ofrezca ventajas formativas, comerciales y económicas a nuestras asociadas y apostar por proyectos relacionados con el mundo empresarial que consoliden y aumenten el espíritu emprendedor de las mujeres albaceteñas.
¿Cuántas empresarias conforman hoy la Asociación y cuál es el perfil de ellas?
Actualmente contamos con cerca de 500 socias entre Albacete y el resto de municipios de la provincia. No existe un perfil. AMEPAP abre las puertas a la nueva mujer empresaria, a la autónoma que desarrolla una labor individual o a la mujer empresaria que dirige una plantilla de más de cien personas, a las ejecutivas, directivas etc. Entre ellas, el perfil de nuestras socias es muy variado.
¿Cuáles son los principales ámbitos de actuación de AMEPAP? ¿Algún proyecto en concreto que quiera destacar?
El requisito indispensable para formar parte de nuestra asociación es ser empresaria, ejecutiva o directiva y desarrollar la actividad en la provincia de Albacete. No excluimos ningún negocio y mantenemos una comunicación fluida con todas nuestras asociadas para conocer cuáles son sus principales demandas y necesidades. Para AMEPAP, la formación sigue siendo un pilar fundamental. Desarrollamos cursos de diversas materias a lo largo del año para que nuestras asociadas fomenten y adquieran nuevas habilidades y capacidades que ayuden a la progresión de sus negocios o metas. Respecto al proyecto más destacado de la última legislatura, sin duda, fue el I Congreso Regional de Mujeres Emprendedoras. No sólo por la repercusión mediática que tuvo, Albacete se convirtió en el epicentro de la mujer empresaria manchega durante un fin de semana. Fue un punto de encuentro, que atrajo a ponentes de primer nivel del ámbito nacional, en el que la mujer emprendedora aprendió y compartió.
Háganos un breve boceto de la situación del empresariado de Albacete y del papel que desempeña en él la mujer.
Lo digo siempre, a pesar de la situación económica por la que está atravesando el país, Albacete sigue siendo pionera a nivel nacional respecto al número de mujeres empresarias.
¿Cree que, a pesar de la legislación, la igualdad de género continua siendo un reto en las empresas?
Evidentemente sí. Todos los días las mujeres tenemos que esforzarnos un poco más que los hombres para poder llegar donde nos merecemos.
¿Cuál sería el desafío más acuciante para la mujer empresaria desde AMEPAP?
Sin duda, la conciliación entre la vida laboral y personal sigue siendo uno de nuestros principales desafíos. Aunque hemos progresado mucho, la carga que en este sentido continúa soportando la mujer sigue siendo mayor.
¿Cree que llegará el día en el que no sean necesarias asociaciones empresariales femeninas como la que preside?
Lo creo. Sin embargo, todavía queda mucho trabajo pendiente y tendrán que pasar muchos años para que las asociaciones empresariales femeninas se disuelvan.
¿En qué momento decidió involucrarse en el mundo empresarial? ¿Y en el del asociacionismo femenino?
Son ya muchos años; Monté mi primera empresa con 20 años, llegué a tener más de 65 personas a mi cargo, aunque no consiguió el éxito que yo hubiera querido (me faltaba formación, decidí seguir estudiando y cuando estuve formada volví al mundo empresarial y ahí sigo… Respecto al Asociacionismo, yo colaboraba con la antigua junta directiva llevando protocolo y organización de eventos (En una de mis empresas nos dedicamos a esto, soy Técnico Superior de Protocolo Empresarial e Institucional) y cuando la anterior presidenta decidió dejar la riendas, me presenté porque creía y creo que es muy importante que la Asociación siguiera adelante… Porque una voz se oye muy bajito pero la de 500 mujeres llega muy lejos.
¿Qué valores considera imprescindible en la actividad empresarial?
Constancia e ilusión. La combinación de estos dos valores es la clave del éxito de muchos proyectos empresariales.
¿Qué consejo le daría a las mujeres empresarias, emprendedoras o las que quieran llegar a serlo?
Principalmente daría dos consejos: que nunca se rindan y peleen por aquello que desean; y que no dejen de formarse. Adaptar nuestros conocimientos a los nuevos tiempos, al cambio tecnológico que estamos sufriendo en los últimos años, es una apuesta segura para que nuestros negocios y empresas se mantengan a flote y sobrevivan a pesar de las dificultades.
Isabel García
