Flora y María, santas

S. IX. Mártires – Jóvenes andaluzas que sufrieron martirio en pos de defender sus creencias. María era natural de Niebla, mientras que Flora nació en Sevilla. Flora era hija de padre musulmán y madre cristiana y fue denunciada por su hermano para que renegara del cristianismo, sufriendo un primer martirio en Ossaria, Jaén, y luego en Córdoba es llevada ante el juez musulmán (cadí), donde la conoce a María, quien pertenecía cenobio de Cuteclara y había salido a la calle a proclamar su fe cristiana tras el martirio sufrido por su hermano Walabonso. Flora y María coinciden en la iglesia de San Acisclo donde juntas deciden desafiar a la autoridad y seguir firmes en sus convicciones religiosas. Ambas fueron decapitadas el 24 de noviembre del año 851 y sus cuerpos fueron arrojados al río Guadalquivir.